De esta manera personal del área Abasto dependiente de la Subsecretaría de Comercio del municipio, llevó a cabo en primera instancia la detección y posteriormente el decomiso de una gran cantidad de grasa que no cumplía con la legislación vigente. La intención era comercializarla en nuestra ciudad.
En este caso el chofer del móvil tampoco pudo fundamentar con la documentación requerida, el origen y las condiciones de traslado. La mercadería fue destruida.